El aceite de oliva es un aceite que se extrae de las aceitunas que son los frutos del olivo.

El proceso de producción es relativamente sencillo. Las aceitunas se pueden presionar para extraer su aceite, pero los métodos modernos implican triturarlas, mezclarlas y luego separar el aceite de la pulpa en una centrífuga.

La composición de ácidos grasos del aceite de oliva es de alrededor del 75% de grasa monoinsaturada, llamada ácido oleico u omega 9, que se asocia con múltiples beneficios para la salud, sin embargo, su principal beneficio saludable radica en su alto contenido de antioxidantes que mantiene gracias a la naturalidad de su proceso.

También contiene vitamina E, una vitamina liposoluble que tiene función antioxidante y es antiinflamatorio protegiendo las células y favoreciendo la salud de la piel y de la vista.

Los ácidos grasos y los antioxidantes del aceite de oliva pueden ofrecer importantes beneficios para la salud, incluido un riesgo reducido de enfermedades cardiovasculares.

Como lo cometamos anteriormente, el aceite de oliva es la principal fuente de grasas de la dieta mediterránea. Las personas que consumen esta dieta parecen tener una mayor esperanza de vida, incluso un menor riesgo a padecer enfermedades del corazón.

Más que una forma de comer, la dieta mediterránea es un estilo de vida saludable que se practica en los países del Mediterráneo. Lo destacable de esta dieta es el papel central que juegan las verduras, las frutas, el pescado, el queso, el vino y, por supuesto, el aceite de oliva, como su ingrediente clave.

Otra de sus características son las proporciones en los nutrientes principales que guardan sus recetas, los cereales y vegetales son la base de sus platos, las carnes son una guarnición o está presentes en una porción más pequeña.

También la riqueza en micronutrientes que contiene, fruto de la utilización de verduras de temporada, hierbas aromáticas y condimentos.

La dieta mediterránea es un aporte importante para llevar una vida saludable, tanto que la UNESCO la considera Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Si quieres cambiar tu estilo de vida y mejorar tu salud, puedes empezar por:
– Comer más frutas y vegetales.
– Optar por los granos enteros.
– Consumir grasas saludables y ricas en antioxidantes como el aceite de oliva
– Comer más pescado y productos del mar
– Reducir las carnes rojas
– Disfrutar un poco de lácteos
– Optar por un poco de sabor y sustituir la sal por hierbas de olor y especias.

Aquí encontrarás un par de recetas mediterráneas que puedes cocinar con Oli de Nutrioli.

Hablando de cocinar es muy importante comprar el tipo correcto de aceite de oliva para tu cocina.

El aceite de oliva extra virgen es un aceite sin más proceso que la extracción por medio de prensa de la aceituna y dada la naturalidad de su proceso te permite cocinar a temperaturas bajas y medias. Es ideal para para aderezar, marinar y dar un toque a tus vinagretas y dips. Para este propósito Nutrioli cuenta con Oli Extra Virgen, que le dará ese toque mediterráneo y aromático a tus platillos.

Por otro lado, si necesitas cocinar a temperaturas más altas, Nutrioli tiene para ti Oli Aceite de Oliva: una mezcla de aceite de oliva refinado y aceite de oliva extra virgen, esta mezcla lo hace ideal para cocinar a temperaturas altas, freír, dorar y guisar cualquier platillo.

Si buscas llevar una vida saludable el aceite de oliva es una excelente opción que puedes